Entrábamos por la puerta de la Facultad de Bellas Artes de Pontevedra, era la primavera del 2008, Marthazul iba a recoger su título firmado por el rey Juan Carlos, el que le certifica como licenciada en Bellas Artes. Me sorprendió que estuviera nerviosa y que no le sentara bien entrar a ese lugar en el que pasó seis años de su vida. Yo nunca sentí ese sentimiento desagradable al entrar en la facultad de arquitectura donde estudié, más bien todo lo contrario, siempre lo percibí como un lugar seguro, inspirador y placentero.

A lo largo de los años ella me ha contado detalles de algunos momentos que han sido los causantes de esa sensación de malestar orgánico que tiene hacia su facultad, y de la que mayormente los y las docentes del centro fueron responsables de ello.

Imagina que terminas «tercero», tienes 21 años y comienzas el cuarto curso con la especialidad que decidiste, en el caso de Marthazul, sería pintura, y la bienvenida te la dan tres profesores: Juan Carlos Meana, Álvaro Negro que sustituía a Almudena Fernández Fariña, y Alberto Ruiz de Samaniego, este último en nombre del resto, les dijo: «Os vamos a atacar como buitres» y en efecto, así lo hicieron durante esos años, utilizando todos aquellos recursos más cercanos al bullyng empresarial, que a una sensible y formativa actividad docente.

Por eso, cuando vi la intervención de la fachada de esa escuela, que hizo su recién graduado Jerry Ruiz Barzola, habiendo tachado la palabra «Belas» del rótulo que dice: «Facultade de Belas Artes de Pontevedra» y, abajo con spray, añadiendo la leyenda «MALAS ARTES», pensé en lo de acuerdo que estaba con ese mensaje.

Me reuní con Jerry para saber el por qué, el cuándo y el cómo lo hizo, pero al ser una historia que no ha terminado y porque se deben cumplir unos plazos donde hay mucha gente implicada, decidí no extenderme aquí en los detalles de su «obra». Solo le expliqué que esas «MALAS ARTES» en mi opinión son ciertas, después de conocer muchas historias de bullyng del profesorado hacia alumnas , en una serie de testimonios de generaciones sucesivas que he ido escuchando y que coinciden en detalles y nombres. O el acoso de un profesor a alumnas que según la cantidad de piel que enseñaban era proporcional a la nota que se les ponía.

En palabras del propio Jerry: «Pretendo ir más allá de la simple crítica al profesorado, es una contestación al arte conceptual, al concepto de belleza y al cómo se dicen las palabras». Tiempo después de su intervención en la fachada, hizo un performance coincidiendo con «San Ero», en el que colocó un folio cerca de la pintada, con su manifiesto «MALAS ARTES», donde comenta y argumenta su obra, que se puede leer en el siguiente enlace.

Después de ver exposiciones, entrevistas, leer textos y escuchar hablar en medios de comunicación a docentes de ese centro, entiendo que mucho del profesorado de Bellas Artes de Pontevedra, sobre todo en su etapa fundacional, no estaban capacitados para formar a futuras profesionales, a veces me parece que no están capacitados ni para desarrollar su propia profesión. En mi opinión muchos de ellos y ellas han estafado al sistema público, cobrando dinero de todos y todas por un servicio que no han hecho o que han mal hecho.

La obra de «MALAS ARTES» de Jerry, se borra, pero la impronta negativa y el maltrato de parte del profesorado de la «Facultade de Belas Artes de Pontevedra» hacia el alumnado, no.

Augusto Metztli.

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