En México cuando un déspota como Javier Duarte, gobernador de Veracruz, amenaza a los periodistas (con una vocecilla de psicópata) diciendo: «Hay que portarse bien», significa no cuestionar al gobierno municipal, estatal y nacional, no ridiculizarlo o dejarlo en evidencia. «Portarse bien» es lo mismo que mentir, repitiendo la mentira institucionalizada de la nota de prensa que el gobierno remite a los medios. «Portarse bien» es admitir los sobornos, y agachar la cabeza frente al amedrantamiento. «Portarse bien» es mirar a otro lado mientras la mezquindad devora a tu propio pueblo, es ignorar a los movimientos sociales que buscan una vida digna y justa para todxs. Es aplaudir y dar palmaditas a los saqueadores como Javier Duarte o Peña Nieto y su familia.
Porque si no te portas bien, habrá castigo. Serás asesinado. Serás víctima de uno más de los crímenes de Estado perpetrados por el Partido Revolucionario Institucional y su maquinaria de la muerte.
A continuación el nombre de los asesinados, bajo el mandato de Javier Duarte del PRI: Noel López Olguín, Miguel Ángel López Velasco, Misael López, Yolanda Ordaz de la Cruz, Regina Martínez Peres (periodista que investigaba corrupción en el gobierno de Veracruz), Guillermo Luna Varela, Gabriel Hugo Córdova, Víctor Manuel Báez, Esteban Rodríguez, Irasema Becerra, Gregorio Jiménez, Octavio Rojas Hernández, Moisés Sánchez Cerezo, Juan Mendoza Delgado, Armando Saldaña. Y las «cinco víctimas de Narvarte»: Olivia Alejandra Negrete de 40 años, Mile Virginia Martín (emigrante colombiana) Nadia Vera Pérez (activista social y miembro del colectivo #YoSoy132), Yesenia Quiroz Alfaro (estudiante) y el fotoperiodista (amenazado por el gobernador de Veracruz) Rubén Espinosa (31 años).
En recuerdo de todos los que NO se «portaron bien» y fueron asesinados.
Rubén Espinosa (A 7 días de su asesinato).