La película “Los Gremlins” cumplió 30 años, y en Boreal queremos despedir este año con su protagonista.
Fue una película que marcó a una gran generación, que muchos vimos siendo niños, adolescentes o ya adultos, porque la nostalgia y la locura no tienen fecha de caducidad.
Desde entonces, es típico escuchar “gremlin” como calificativo negativo, relacionado con algo/alguien desagradable, feo, desaliñado. Es inevitable que esos seres pringosos, y diabólicos remitan esa sensación, porque por desgracia sigue habiendo humanos indeseables.
Pero siempre nos olvidamos de Guizmo, y creo que fue un protagonista sin el protagonismo suficiente. Los malvados y descuidados absorbieron su papel, y no nos permitieron conocerlo más.
Por eso mi homenaje es para esa bolita peluda de grandes orejas y ojos saltones, con mirada super tierna, que no tuvo a alguien capacitado para cuidarlo, respetarlo, y compartirle lo mejor.
Felicidades Guizmo!!
Marthazul.