Me indigna la gente báscula, que opina del peso y curvas ajenas; me indigna la gente dermatóloga, que denuncia y hace públicos los granos, lunares y verrugas ajenas; me indigna la gente preñadora, esa que ve embarazos en todas las barrigas y lo dice, interroga y hostiga. Por lo general son mujeres (en la menopausia o sin ella) diciéndoselo a mujeres (sin menopausia o con ella).
Cuando unx humanx opina sobre el cuerpo de otrx humanx me resulta violento, pero que además opine sobre lo que hay o no hay dentro de ese cuerpo, me resulta aún más violento. Es perpetrar el concepto de «mujer incubadora», o perpetrar frases como «aparato reproductor» como si no tuviera otras funciones, utilidades y posibilidades.
En ese sitio conocido como la barriga, la panza o el vientre, donde la gente solo ve bebés, hay y pueden haber un montón de cosas más: Células, tejidos, materia y procesos biológicos que se encargan de dar placer al propio cuerpo, de procesar la comida, de extraer sus nutrientes, también según la hora del día ahí dentro puede haber comida, recién comida o apunto de ser expulsada, también pueden haber gases y fluidos, un poco de grasa o mucha grasa, un poco de piel o mucha piel, meo – pis – orines, puede haber sangre menstrual, según la luna…
Yo sé de mujeres que también esconden en esas barrigas, libros, discos, meteoritos, baobabs, galaxias, islas paradisiacas, aviones, escaleras, planetas, veleros y volcanes. Así que si ¿ves embarazadas en todas partes? mejor hazlo en silencio.
Augusto Metztli.