Una beluga remonta el río Sena y se adentra 160 kilómetros en el interior de Francia. Estos cetáceos están acostumbrados a vivir en las aguas frías de la región ártica y subártica. El exceso de la contaminación sonora de los mares o las modificaciones en las corrientes submarinas debido al calentamiento global son algunas de las posibles causas que barajan los especialistas para explicar estos comportamientos.

El animal, un macho de 800 kilos, había dejado de alimentarse y presentaba dificultades para respirar. Finalmente, a pesar de los esfuerzos del equipo formado por 80 especialistas, tuvo que ser sacrificado.

Fernando Prado.

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